Una felicitación muy sentida

 El plan de vida que traje a este planeta, en esta visita, fue bien variado: muchos cambios, diversas culturas, pérdidas muy dolorosas, experiencias de todo tipo que bien conoces amiga querida. No ha sido fácil mi camino pero aún así sé que lo he transitado de la mano de mi Jefe, de mi Padre, de mi más íntimo Amigo. Como Él sabe que he necesitado de manos y corazones que me acompañen, que celebren conmigo mis alegrías y que me ofrezcan su hombro en mis penas, me ha regalado unos seres humanos maravillosos que han sido la luz en mis soledades, las campanitas de mis momentos felices y la mano tendida, sabia y solidaria en mis necesidades. Esas son mis amigas, me sobran dedos de una mano para contarlas pero hoy felicito a una tan especial, que lo hago con los ojos llenos de lágrimas de cariño, gratitud y felicidad. Haber podido contar contigo siempre, sin falta, sin excusas, sin acomodos, con toda tu alegre disposición, tu sentimiento inmenso cuando de compartir una aflicción se trata y tu compañía generosa siempre presente aunque la distancia se interponga, es algo por lo que me siento en deuda enorme y eterna contigo. Comprender mis silencios y mis desarraigos es algo que valoro mucho en esta relación de hermandad.

Celebrar tu día hoy significa llenar a mi Jefe, Padre y Amigo de peticiones para que cuide tu salud, para que te permita seguir siendo la que siempre has sido, te de la mano en tus dificultades, te acompañe en tus decisiones y te premie con esos regalos que deseamos y no pedimos o no sabemos cómo obtener.

Desde la distancia te abrazo, te bendigo y te deseo que la vida sea siempre tan generosa contigo como tu lo has sido para mi.

Feliz cumpleaños querida Carmenza!